El COE, un organismo muy singular
Los representantes de las federaciones no olímpicas cuentan con la mayoría de los votos en el comité español
Hay padres e hijos, hermanos, apellidos ilustres e incluso nobles representados por una alteza real dos príncipes y un barón. También todo tipo de ideología política, con predominio de conservadores y un ala derecha radical. Todos ellos forman el COE.El presidente del COE es Romà Cuyàs. Se declara independiente pero ha hecho campaña con los socialistas. Sobre él pesa un expediente de inhabilitación por haber presentado, como presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), un real decreto que limita el período presidencial en las federaciones deportivas. Dos tercios de la asamblea del COE han solicitado su destitución. Esto dio motivo a la presentación de interpretaciones jurídicas contradictorias realizadas por reconocidos expertos en derecho administrativo, sobre los estatutos del COE.
El COE tiene 115 miembros Los hay de distinta naturaleza. Pueden ser electos, consejeros de honor, federativos natos y asesores.
Los miembros electos son 11. Romà Cuyàs, "por haberse distinguido por un relevante y altruista apoyo al deporte aficionado"; Rafael Cavero (atletismo) y Joaquín Dualde (hockey hierba) "por haber destacado en una continuada labor al frente de una federación española olímpica". El requisito aplicado a Luis Álvarez de las Asturias, Conrado Durantez, Manuel Herrero, Juan Junquera, Jaime López-Amor, Pedro Porras y Victoria Ybarra de Oriol no está definido, en algunos casos porque se consideró el "haber sido miembro del COE" en épocas anteriores, respondiendo a un compromiso por la naturaleza del cargo o de la persona. Por último, Juan Sabater es el único miembro electo por haber sido "un destacado deportista, tanto en resultados como en comportamiento", condición que en su día, se consideró que no reunían Emiliano y Francisco Fernández Ochoa, ya que fueron rechazados en la votación.
Los consejeros de honor son 8: Juan Antonio Samaranch Torelló y Pedro Ybarra, barón de Güell, por "ser miembros del Comité Olímpico Internacional", y Benito Castejón, Jesús Hermida, Anselmo López, Tomás Pelayo Ros y Jaime de San Román "por haber sido presidente o secretario general del COE". También es consejero de honor Antonio Navarro, que fue vicepresidente, pero nunca presidente o secretario.
Los miembros federativos son 56 como "representantes de las federaciones españolas": Luis María Puyo (actividades subacuáticas), Angel García (ajedrez), Juan Manuel de Hoz (atletismo), Sandro Rocci (automovilismo), Ernesto Segura (baloncesto), Roberto Tendero (balonmano), Miguel Ortín (béisbol), Jesús Villamor (billar) Segundo Eguía (bolos), Pastor López (boxeo), Lesmes Peña (caza), Luis Puig (ciclismo), Francisco Soler (colombicultura), Carlos Vento (colombofilia), Antonio Gil (deporte aéreo), Jesús Maza (deporte minusválidos), Francisco Camacho (deporte universitario), Juan Ruiz (esgrima), Pau Pérez (espeleología), su alteza real Alfonso de Borbón (esquí), Andrés Morros (esquí náutico), Pablo Porta (fútbol), Antonio del Rincón (galgos); Angel Gómez (gimnasia), Luis Figueras (golf), Pedro Varez (halterofilia), Alfredo Goyeneche (hípica), Ignacio Zaldúa (hockey hielo), José María Andreu (hockey hierba), Luis Báguena (yudo), Celestino Fernández (kárate), Fernando Compte (lucha), Manuel Martos (luge), Fernando Mufloz (montañismo), Luis Soriano (motociclismo), Francisco Gracia (motonáutica), Enrique Landa (natación), Antonio González (patinaje), Segismundo Fraile (patinaje sobre hielo), Antonio Aranguren (pelota), Juan Antonio Samaranch Salisachs (pentathlon moderno), Salvador Sánchez (pesca), Manuel Fonseca (piragüismo), Luis Valdés y Colón de Carvajal (polo), Félix Erdocia (remo), Alberto Pico (rugby), Juan Alvarado (salvamento y socorrismo), Gonzalo Muñiz (taekwondo), Pablo Llorens (tenis), Enrique Blanco (tenis de mesa), Antonio Pérez (tiro con arco), Miguel Torres (tiro de pichón), Manuel Rivas (tiro olímpico), Miguel Company (vela) y Alberto Portell (voleibol).
Los miembros natos son 37. Por ser presidente de una federación internacional o ser miembro de uno de sus comités ejecutivos": Jorge Masana (actividades subacuáticas), Román Torán (ajedrez), príncipe Fernando de Baviera (automovilismo), Alberto de San Román (balonmano), Raimundo Saporta (baloncesto), José Antonio Gil (boxeo), José María Blanc (caza), Guillermo Cabezas (deporte minusválidos), Adolfo Eraso (espeleología), Isidro Olíveras (esquí náutico), Félix Fernández (gimnasia), Juan Antonio Andreu (golf), Juan Francisco Marcos (halterofilia), Juan Ángel Calzado, Mercedes Corbacho y Juan Manuel Sainz (hockey hierba), príncipe Adán Czartoryski Borbón (kárate), Pascual Olmos (yudo), José Antonio Odriozola (montañismo), Nicolás Rodil (motociclismo), Norberto Mallo (motonáutica), Alberto Cortina y Jesús Fernández (pelota), Joaquín Díez (pesca), Julío Apraiz y Florencio Noriega (rugby), Federico Canto y José Antonio de Pascual (salvamento y socorrismo), Julio Herradón y Manuel Marco (taekwondo), Miguel Soto (tiro con arco), Antonio Gaiztarro y Fernando García (tiro de pichón), Fernando Ximénez (tiro olímpico) y Arturo
El COE, un organismo muy singular
Cortés (voleibol). Por ser "representante de asociaciones": Joaquín Díaz Palacios (informadores deportivos) y José María Lorente (periodistas deportivos). Y por ser representante del Ministerio de Asuntos Exteriores: José Manuel Paz.Los miembros asesores son tres, elegidos por la asamblea, "para cumplir funciones técnicas o administrativas: Martín Aleñar (administrador), Santiago Herrero (interventor) y Miguel García-Baró (asesor de cultura y arte). Estos cargos, a excepción de los otros, son retribuidos.
Tiro de pichón, tres; atletismo, uno
Cada miembro del COE, a excepción de los asesores, tiene un voto. Y, en la práctica, en la votación siempre tiene más fuerza, por ejemplo, el tiro de pichón que el atletismo, puesto que el primero tiene tres personas como representantes dentro de la asamblea, y el segundo, uno. Esto se traduce en que globalmente, las federaciones no olímpicas (48 votos) tienen mayor poder decisorio en el pleno que las olímpicas (42).
A esta situación se ha llegado porque en el seno del COE se admitieron miembros natos de federaciones no olímpicas, cuando no se puede comparar la dificultad que entraña el ocupar un puesto ejecutivo en una federación internacional de uno u otro deporte. Atletismo, baloncesto y fútbol, por ejemplo, tienen más de 150 países afiliados, cuando una veintena de otros deportes no llega a los 25. Es una realidad que en algunos deportes, según palabras de funcionarios del COE, se puede pertenecer a la federación internacional correspondiente, si es que la tiene, "con enviar un par de jamones en un momento oportuno o comprometerse a pagarse los viajes para asistir a las reuniones".
Llegar a un más lógico reparto de los votos en el COE no parece fácil. Para ello habría que cambiar los estatutos, que fueron aprobados, en febrero de 1982, bajo la presidencia de Jesús Hermida. La asamblea no quiere el cambio ni parece fácil mientras casi el 50% de los votos lo sigan disfrutando las federaciones no olímpicas.
Mientras, las soluciones que se barajan están orientadas a comprometerse a facilitar una contraprestación a las federaciones no olímpicas, a cambio de que renuncien a sus votos en los temas olímpicos. Tampoco se descarta una solución más fácil y, a la vez, más radical: promulgar que cada federación no pueda tener más de un voto, con lo cual la mayoría de votos pasarían a tenerla las olímpicas.
