Aprobada la agravante de xenofobia y racismo para delitos contra las personas

La aprobación de 37 artículos del Código Penal por la Comisión de Justicia e Interior del Congreso ofreció ayer, como principales innovaciones, la agravante de racismino y xenofobia para delitos contra las personas y la nueva pena del trabajo en beneficio de la comunidad.

Entre las circunstancias que agravan la responsabilidad criminal se incluyó, a propuesta socialista, la de "cometer cualquiera de los delitos contra las personas por motivos referentes al origen étnico o nacionalidad de la víctima". La unanimidad en favor de esta enmienda no fue óbice para que toda la oposición reprochara al PSOE que se quedara a mitad de camino y no admitiera ampliar la agravante a los demás delitos.Joseba Azkárraga (por EA) pidió que se aplicara a quienes, sin atentar contra las personas, se niegan a alquilar una vivienda, destrozan un vehículo o incendian una casa por móviles racistas o xenófobos, a los que José Luis Núñez (por IU), calificó de "repugnantes". Josep María Trías de Bes (por CiU) alertó, además, contra la necesidad de protección "ante el resurgimiento del nazismo y del integrismo religioso".

A todos ellos contestó el ponente socialista Carlos López Riaño, quien se esforzó en convencer a los diputados. "No debemos dejarnos llevar por impulsos", dijo, "y, como acto inicial de respuesta, nuestra enmienda es muy contundente". López Riafio se mostró flexible al admitir la agravante propuesta por CiU para los delitos contra las personas en los que el responsable obre "con premeditación" y la sugerida por el CDS para el empleo de disfraz.

En cambio, no aceptó la propuesta de IU de suprimir la agravante de reincidencia, argumentada por Núñez como obstáculo para la resocialización de los delincuentes, al castigar con mayor pena la recaída. Tampoco admitió la enmienda del PP que pretendía suprimir la equiparación entre que el agraviado sea el cónyuge o la "persona a quien se halle ligado de forma permanente por análoga relación de afectividad", a efectos de agravar o atenuar la pena. "Suprimir esa equiparación sería dar un paso atrás", dijo López Riaño.

Trillo y su 'ley mordaza'

El debate sobre el título relativo a las personas criminalmente responsables de los delitos y faltas permitió al portavoz del PP, Federico Trillo, a propósito de los delitos cometidos a través de los medios de difusión, insistir en la calificación de ley mordaza que viene otorgando al proyecto de Código Penal y recordar la inhabilitación de periodistas.

Trillo pidió la supresión del artículo 27, que exime de responsabilidad en tales delitos a los cómplices o a quienes los favorecieran personal o realmente y establece la responsabilidad escalonada de redactores, directores, editores e impresores, lo que conduce a la censura", dijo.

López Riaño contestó que el autor de un delito publicado debe ser responsable, "como el médico o el maestro al que aplicamos la inhabilitación".

En la última parte de la sesión el PP impugnó el sistema de penas del nuevo código, en especial los arrestos de fin de semana, que Trillo calificó de "experimento, que hay que hacer", ironizó, "con gaseosa". El ponente socialista Álvaro Cuesta lo defendió como acorde "con una concepción moderna, que combina avances doctrinales y realidad social". En coherencia con esta actitud, incluyó como nueva pena la realización de trabajos "en beneficio de la comunidad", entre 20 y 120 horas. Asimismo, aceptó en parte una enmienda de IU, que permitirá sustituir el impago de multas por arrestos de uno a seis fines de semana.