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CULTURA EL CURSO SOBRE EL ESCRITOR SE CENTRA EN EL PARÍS DE ENTREGUERRAS

Bonet destaca la influencia que ejercieron Miró, Gris y Picasso sobre Hemingway y su literatura

Ferran Bono

Ernest Hemingway "tuvo la vista de estar cerca de los pintores". A partir de esa premisa, el director del IVAM, Juan Manuel Bonet, se adentró ayer en el entorno artístico que rodeó al escritor nortemaericano en el París de entreguerras. Y fueron artistas españoles los que más le influyeron, sobre todo Joan Miró y Juan Gris, pero también Luis Quintanilla y Pablo Picasso. Con ellos estableció la relación más importante con el mundo de las artes plásticas. La influencia de España en Hemingway fue más allá de su consabida afición por los toros, como se puso de relieve ayer en el curso de la UIMP sobre el escritor.

Bonet sostuvo que los lazos de amistad de la generación perdida con los pintores y artistas de vanguardia en el París de los años veinte "oxigenó" la prosa y poesía de los escritores norteamericanos que fueron recalando en París tras la Primera Guerra Mundial, como el propio Hemingway, Scott Fitzgerald, John Dos Pasos o Henry Miller. "Fue una lección de modernidad", añadió el autor del Diccionario de las vanguardias en España, para quien el siglo XX se caracteriza también por la fusión de las artes. Los caligramas de Apollinaire ilustran esa evolución en el mundo del arte ya en los primeros años de la centuria. París se convirtió en la capital cultural más importante del momento. Y allí peregrinaron artistas plásticos y escritores norteamericanos que más tarde contribuyeron a desplazar la capitalidad de la modernidad a Nueva York. En ese contexto, la coleccionista de arte, mecenas y escritora Gertrud Stein ejerció de anfitriona e iniciadora en el arte de las vanguardias para muchos de sus compatriotas, entre ellos Hemingway. Bonet incidió en este aspecto y recordó que el autor de París era una fiesta, donde aparece un retrato elogioso de Stein, conoció, precisamemente, la obra de Picasso, Miró y Gris en la casa de la que también fue una de las precursora de la escritura automática. El contacto anterior del escritor con el arte moderno se limitaba a unos cuadros que había visto en Chicago y concretamente algunas obras de Cézanne que le impresionaron. "Gertrud Stein fue testigo, actriz e introductora de la modernidad", comentó Bonet, quien subrayó también la importante influencia que ejerció el poeta Ezra Pound sobre Hemingway. De hecho, Stein y Pound adquirieron un gran protagonismo para todos los escritores de la generación perdida. En este amplio círculo de amistades entre escritores y artistas plásticos que también incluía al pionero de la modernidad en el campo fotográfico, Man Ray, Hemingway trabó relación con Juan Gris a través de Stein. El director del Instituto Valenciano de Arte Moderno definió a Gris como un pintor "de la estirpe de Zurbarán, un pintor grave, de formas puras". El escritor norteamericano le compró dos cuadros, El torero y El guitarrista, que precisamente se puede interpretar que se acercan al concepto de españolada, aunque subayace "una mirada irónica a ese mundo" del pintor, según apuntó Bonet. "La Masia" de Miró Pero fue con Joan Miró con quien estableció una gran amistad. El cuadro La Masia, del pintor catalán, acompañó a Hemingway a la largo de todo su periplo vital, apostilló el periodista y coorganizador del curso Rafael Ventura Meliá. Miró pintó sus raíces, el paisaje familiar de Montroig con la mirada propia de "un entomólogo", comentó Bonet. Éste calificó el cuadro de excepcional, perteneciente a la etapa anterior al salto que dio Miró a un "surrealismo muy atípico, porque en el fondo era más abstracto y sintético, incluso es reivindicado por los constructivistas". Bonet salpica su discurso con continuas asociaciones de ideas y datos. Así, hablando del paisaje de Montroig, que Hemingway llegó a visitar, recordó que otro norteamericano que pasó por París, el escultor Alexander Calder, eligió las tierras catalanas de Montroig para una de las tres representaciones de su conocido circo de alambres en España. También entabló una gran amistad Hemingway con el cartelista Luis Quintanilla a partir de los años treinta. El escritor norteamericano prestó una ayuda "decisiva" a este pintor socialista que fue un "gran muralista y un grabador cercano al mundo corrosivo de George Grosz" cuando se exilió a EE UU. Y es el país norteamericano, concretamente en el museo nacional de Washington, donde se exhibe el cuadro La masia de Miró. No en vano, toda la experiencia acumulada por los escritores de la generación, sus amigos, los impresores y también los coleccionistas redundó en "beneficio de la cultura en EE UU", recalcó Bonet. Nueva York acumuló una gran cantidad de obras mayores de las vanguardias europeas, mientras que en España los vestigios de aquella época son mínimos porque apenas se compraba. Bonet también insistió en que mientras los escritores norteamericanos se relacionaron mucho con los artistas plásticos franceses, apenas hubo contacto con los escritores franceses. Comentó entonces que el propio André Breton apenas prestaba atención al mundo anglosajón o hispánico, cuyos idiomas desconocía, y, en el sentido de que miraba sólo hacia la cultura francesa, tildó al precursor del surrealismo de chovinista. Esto provocó la posterior intervención del escritor cubano y profesor en París, Jacobo Machover, participante del curso que concluye hoy. Machover rechazó que el "mundo intelectual francés" fuera chovinista y puso ejemplos de artistas de procedencia diversa inscritos y aceptados en el surrealismo. Bonet recordó que estaba hablando de literatura y del caso contrastado de Breton. En este punto, Ventura Meliá citó las palabras de John Dos Passos, en las que decía que los escritores norteamericanos preferían relacionarse con los pintores, que consideraba gentes sencillas.

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Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

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