"Los Simpson" cumplen 10 años
El 14 de enero de 1990 la cadena Fox emitió el primer episodio de Los Simpson, que se ha convertido en la comedia más antigua de la televisión actual. La familia televisiva más patética ha resistido 10 años en antena a pesar de la inteligencia de sus guiones y lo despiadado de su crítica, dos cualidades que tradicionalmente condenan al fracaso cualquier iniciativa en este medio. El cumpleaños de Los Simpson -serie que en España emite Antena 3- se celebra en Estados Unidos con un nuevo lanzamiento comercial -juegos, libros y vídeos- y un premio para el creador, Matt Groening, y los personajes: el viernes pasado se les concedió el prestigio de tener su propia estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
Los Simpson han permanecido fieles a su filosofía de vida. Buena parte de las telecomedias actuales no existirían sin las aportaciones al género de la familia amarilla: suya es la capacidad de generar empatía hacia personajes despreciables y la habilidad de satirizar sobre elementos intocables de la sociedad (religión, familia, educación, trabajo) sin provocar el rechazo de quienes los consideran sacrosantos. Para la Fox, Los Simpson fueron justo lo que buscaban: una serie tan polémica en sus comienzos como para ser capaz de rentabilizar las críticas de los más conservadores. A lo largo de estos 10 años, los guionistas se han aprovechado de que sus personajes sean animados; semejantes atrevimientos habrían sido imperdonables en una telecomedia convencional. Otro mérito: pocas series envejecen con tanta dignidad. Su contenido ya no es socialmente revolucionario (algunos de sus sucesores animados, como South Park o King of the hill, la superan en perversidad), pero Los Simpson han ido modificando los límites de lo permisible en televisión siempre con el humor más refinado; no se pueden alternar mejor los eructos de Homer con las citas de alta cultura.
