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BIENESTAR SOCIAL

Alicante diseña un plan para acabar con la mendicidad infantil en la calle

Una comisión de trabajo, integrada por las concejalías de Acción Social, Educación y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Alicante, la Consejería de Bienestar Social y la organización humanitaria Alicante Acoge, ha elaborado un protocolo de actuación con el fin de atajar la mendicidad de menores inmigrantes.

El objetivo es favorecer su escolarización y conocer el número de niños que piden dinero en las calles de Alicante, ya que desde el mes de agosto se ha detectado un notable incremento de la mendicidad infantil.

Tras una reunión de trabajo celebrada ayer entre las partes implicadas, la concejal de Acción Social, Asunción Sánchez Zaplana, y el edil responsable de Seguridad, Francisco Zaragoza, informaron sobre las actuaciones previstas. Sánchez Zaplana explicó que desde el pasado verano los casos de inmigrantes, fundamentalmente de nacionalidad rumana, que utilizan a menores para ejercer la mendicidad en la ciudad de Alicante 'se ha agravado'. Los niños logran conseguir entre las 3.000 y las 4.000 pesetas diarias, de modo que esta actividad puede resultar muy lucrativa para sus progenitores, según apreció el edil del PP. La utilización de menores para mendigar está castigada por el Código Penal, que recoge incluso penas de prisión, de seis meses hasta un año, además de la pérdida de custodia de los menores.

El Ayuntamiento alicantino, en colaboración con la Generalitat y la ONG Alicante Acoge ha diseñado una plan con el fin de proteger a estos pequeños y propiciar su escolarización en centros públicos.

La edil de Acción Social avanzó que el primer paso a seguir por esta comisión consiste en la confección de un censo de estas familias, cuyo número estimado oscila entre 25 y 30, residentes en la ciudad de modo irregular. Esta tarea resultará 'complicada', auguró la concejal, por el carácter nómado y transeúnte de los rumanos. Una vez conocida la población, se exigirá la escolarización de los niños mayores de seis años, y se concederán ayudas económicas a los padres extranjeros con hijos menores de seis años con el fin de que puedan matricularlos en guarderías. Asimismo, se les facilitará un permiso de residencia con el fin de regularizar su situación.

Por otra parte, el concejal de Seguridad, Francisco Zaragoza, barajó la posibilidad de crear una patrulla específica adscrita a la Policía Local, destinada a la localización de extranjeros que empleen a sus hijos para mendigar. Estos agentes trabajarán en coordinación con los efectivos de la Policía Judicial, pertenecientes a la Nacional.

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Los casos reiterados de mendicidad se comunicarán a la consejería de Bienestar Social, órgano competente para decretar la situación de desamparo de los niños, que ingresarán en centros de menores. 'Seremos rigurosos en el cumplimiento que se les exige a los padres', advirtió la edil.

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