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'Mi fama de conservador no se borrará nunca'

Tras sendas lecciones de fútbol de ataque al Madrid y al París Saint Germain en 10 días, Javier Irureta, de 52 años, todavía cree que no se ha desembarazado de la etiqueta de técnico conservador que ha arrastrado en sus 13 años en Primera. Estudioso del fútbol al método tradicional (vídeos, periódicos y revistas), ingeniero técnico que nunca ejerció, hombre calculador y tranquilo, Irureta acaba siempre por adaptarse al medio, sea cual sea. Mañana será un San Siro agónico, con el Milan como el último bastión del calcio en Europa.

Pregunta. ¿Por qué está tan mal el fútbol italiano?

Respuesta. Algunas veces se ha dicho el tema del mayor control del dopaje, y eso puede levantar sospechas. Pero el fútbol italiano está teniendo muy mala suerte: Ronaldo, Vieri o el Piojo López, lesionados. Aquí no se han lesionado ni Raúl, ni Rivaldo ni Figo. A mí me gusta el fútbol italiano por su profesionalidad y su exigencia. Algunos se han podido lesionar porque se trabaja más físicamente.

'Tras ganar al PSG, de las primeras cosas que hice fue poner en la pizarra: 'Mañana, 11.30, entrenamiento'
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P. ¿Y la crisis de los dos clubes de Milán, los más ricos de Italia?

R. Los equipos no se hacen sólo con dinero. Es algo más que un conjunto de buenos jugadores. A veces hay antagonismos entre los dos mejores delanteros centros: si firmas a Ronaldo y a Vieri, atrás van a mirar poco.

P. ¿Qué sabe del Milan?

R. Para mí va a jugar con Abbiati, si se ha recuperado, Helveg, Sala, Maldini, Roque Junior, y Coco en la izquierda; Albertini, Gattuso, Leonardo; Shevchenko y Bierhoff. José Mari saldrá más tarde.

P. ¿Qué piensa de su entrenador, Zaccheroni?

R. Me han dicho que va a ir Fatih Terim, el turco, a sustituirlo. Zaccheroni viene del Udinese, donde llamaba la atención por un sistema innovador: tres centrales, una línea de cuatro, dos medias puntas y Bierhoff como referencia arriba.

P. ¿Sabía que Zaccheroni ha tenido problemas con Berlusconi porque éste le acusa de ser de izquierdas?

R. No lo sabía. Aquí puede haber todo tipo de corrientes. Me he llevado muy bien con Eugenio Prieto, que es socialista, y ahora con Lendoiro, que es del PP. Pero nunca he hablado de política con ellos.

P. ¿Por qué los clubes españoles están arriba y la selección tan abajo?

R. Es una cuestión de identificación. España ha tenido por momentos a Di Stéfano y a Helenio Herrera y no era una selección de primer orden. El futbolista español ha subido muchísimo, pero le falta una referencia, un Van Basten de sus tiempos en Holanda. También desde aquí se le carga con una responsabilidad excesiva. El jugador argentino, en cuanto a descaro y a conocer el oficio, le lleva tres años al español. Mira Scaloni. Somos demasiado tímidos. Y después en Francia han jugado en otros países. Por ejemplo, Karpin ha tenido un valor de la hostia. Ha venido de Rusia, no se arredra y en muchas situaciones va a saber solucionar. El español no sale de casa. Lizarazu estaba bien en el Athletic y se fue a Alemania por ambición. Nos hemos encerrado y poquísimos tienen la ambición de salir.

P. ¿Le gustaría ser seleccionador?

R. Sí, pero en estos momentos me veo como entrenador de club. Sí me gustaría algo como le ha pasado a Trapattoni, que en la final de UEFA del 77 ya nos ganó al Athletic, que lleva veintitantos años como entrenador, y que ahora ha acabado en la selección italiana.

P. ¿Es usted ambicioso?

R. Sí, me gusta ganar. Pero con ciertos límites. Llevo 13 años seguidos en Primera. Anteriormente estuve en el Getxo infantil y en la selección vizcaína infantil. Y desde entonces, un año en Tercera, un año en Segunda B y tres en Segunda A. A veces me achacan que no soy ambicioso, pero con el Logroñés estuve con positivos; con el Oviedo por primera vez en la historia entramos en UEFA; en el Racing somos octavos; en el Athletic pasamos tres eliminatorias dejando fuera al Newcastle de Keegan. Pero en estos equipos no me pueden pedir ser primero.

P. ¿Quedó enterrada esta fama suya de conservador?

R. No ha sido cierta. Mis equipos siempre han hecho goles, pero esa fama no se borrará nunca. El año pasado éramos el quinto presupuesto y ganamos la Liga.

P. Una Liga que no se ha valorado demasiado.

R. No, porque, al no estar Madrid ni Barcelona, todo parece desvirtuado.

P. A usted, como a Cúper, también se le reprocha su falta de carisma.

R. No sé. ¿Carisma es estar quitándose la chaqueta cara al público y hacer de bombero torero? A mí se me ha achacado muchas veces de ser una persona triste. Soy una persona muy alegre en mi círculo, pero en mi profesión procuro ser serio.

P. ¿En qué ha evolucionado en sus 13 años como técnico de Primera?

R. Tengo una serie de ideas, pero me adapto a todo. Me adapto al sistema que les venga bien a los jugadores.

P. ¿No han adquirido los entrenadores demasiado protagonismo?

R. Creo que no, porque ponen en nuestras manos a gente de un gran valor económico. Pero sí veo que cada vez los entrenadores están más en sintonía con la política empresarial del club. Y yo me he dado cuenta de esto tarde.

P. ¿No se ha visto superado por la presión como Sacchi?

R. No, me encuentro fuerte, tranquilo. Luego desconecto con mis paseos, leo mucho, escucho la radio. Ando y cuando viene la mujer, voy uno o dos días a la semana a misa.

P. ¿Es usted muy religioso?

R. Muy no. Pero cuando vine al Depor, cuando nos llamaba el árbitro, salíamos sin más. Ahora rezamos un padrenuestro, aunque cada uno pueda rezar lo que quiera porque yo he tenido musulmanes, judíos y de todo.

P. ¿Es usted frío?

R. Después de ganar 4-3 al PSG, de las primeras cosas que hice fue poner en la pizarra: 'Mañana a las 11.30 entrenamiento'. Soy bastante calculador.

P. ¿Quién ficha en el Deportivo?

R. Hay una serie de jugadores fichados por mí, en un 70%, y otros por el club, que entran en una política de empresa.

P. ¿Pacta mucho con los jugadores?

R. Sí. Le voy a contar una anécdota. Hubo un jugador que en una concentración le cogí que había hecho algo con una chica. Al principio le castigué porque entendía que era un mal ejemplo. Pero después entendí que el jugador era tan importante en mi equipo, que tuve rápidamente que rectificar. Pensé que más que castigarle, me castigaba a mí y al equipo.

P. ¿Djalminha es tan asombroso desde dentro como desde fuera?

R. Tiene una muy buena izquierda, ha trabajado poco la derecha como casi todos los zurdos, recuerdo a Txetxu Rojo. Al principio entendía que el fútbol es sólo arte. He tenido mis enfrentamientos con él, pero ha ido entendiendo, en estos tres años, que por encima de todo está el equipo, a pesar de que le pueda salir la vena excéntrica.

P. ¿Le ha pedido que no lance los penaltis a lo Panenka?

R. Él tiene un afán de protagonismo que provoca taquicardias, pero no le puedo decir que lo tire de otra manera porque si lo fallara, diría que es por no hacerlo a su manera.

P. ¿Djalminha es el mejor futbolista que ha tenido?

R. He tenido grandes jugadores como Karpin, Guerrero, Fran...

P. ¿Por qué Fran es tan importante en el Depor y tan poco en la selección?

R. Porque Fran ha nacido, se ha desarrollado y finalizará su carrera en el Depor. Aquí su personalidad se realiza de forma natural.

P. ¿No fue excesivo retirar de la selección a Molina por el fallo ante Noruega?

R. Es posible. Al portero no puedes andar cambiándolo constantemente.

P. ¿Qué jugador de los actuales se parece a usted cuando jugaba?

R. Gerard es bastante parecido a mí, aunque él es bastante mejor. Yo hacía 12 o 13 goles por temporada.

P. ¿Por qué todos los cracks, es decir, Maradona, Rivaldo, Djalminha, y ahora Aimar, practican la rabona?

R. Eso es muy de futbolista suramericano, que está mentalizado para los adornos. Y es más fácil que lo haga un chico del sur como Tristán que uno del norte como Fran.

P. ¿Había dispuesto antes de una delantera tan completa: Makaay, Tristán, Pandiani...?

R. Bueno, dos de ellos todavía han de llegar a la selección, casos de Tristán y Pandiani.

P. ¿El Depor ha conseguido un estilo?

R. Estamos cerca, con cuatro atrás, dos carrileros y la salida por los laterales. Cada vez dependemos menos del rival. Ante el PSG tuvimos una posesión del 64%.

P. ¿Quiénes son los favoritos para ganar la Liga de Campeones?

R. El Madrid, el Valencia, el Manchester, nosotros y el Galatasaray.

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