La OPA conjunta de Ferroatlántica y EnBW obtiene el apoyo del 59,5% del capital de Hidrocantábrico
La oferta de 27,3 euros por acción presentada por Ferroatlántica (grupo Villar Mir) y la alemana EnBW para adquirir Hidrocantábrico ha obtenido un 59,5% de apoyos, según los datos provisionales dados a conocer ayer por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La OPA competidora (a 24 euros por título), la presentada por CajAstur y la compañía portuguesa EDP registraba ayer, a falta del recuento definitivo, un 19,20% de adhesiones, según la misma fuente. Los porcentajes obtenidos por cada parte son los previstos. EDP y CajAstur se anotan las acciones adquiridas a la estadounidense Texas Utilities (TXU), que representaban un 19,2% de Hidrocantábrico y se guardan como as para la más que previsible negociación con la oferta ganadora al menos otro 15% del capital, el 10% que controla directamente la caja asturiana y el 5% propiedad de sus empleados.
Prácticamente acabada la batalla de la chequera, que ha durado todo un año, ahora se abre el capítulo de la negociación por el control de la gestión. Los grupos minoritarios (Masaveu, Carceller...) han logrado importantes plusvalías y la cuestión ahora es qué sucederá con el blindaje recogido en los estatutos de Hidrocantábrico y que impide a cualquier accionista, sea cual sea su participación, ejercer derechos de voto más allá del 10% del capital.
Para levantar ese blindaje, cuestión que algún momento fue fundamental para la oferta ahora ganadora, se necesita el acuerdo el 75% del capital. La posibilidad de un pacto parece, por lo tanto, lógica.
Ayer, los dos últimos contendientes en la batalla de Hidrocantábrico, en la que han participado más empresas, desde la belga Electrabel a la alemana RWE, se dieron un respiro. No hubo comentarios. El grupo ganador, ferroatlántica-EnBW, a la espera de datos definitivos, señaló que dejará las valoraciones para la próxima semana. En los próximos días deberá quedar también clara la posición del Gobierno español, que meses atrás cuestionó las aspiraciones de EnBW porque en la misma participa la compañía estatal francesa EDF.
