Vigilancia policial
La manifestación pacífica en contra del desfile militar de Alicante fue un verdadero éxito, con actividades que amenizaron el recorrido y demostraron las verdaderas consecuencias que las fuerzas armadas de opresión tienen. Todo lo que no controlan, lo vigilan, y así pudimos observar el despliegue policial, según ellos, 'para protegernos'. Lo que aquí quedó claro es que tuvieron la desfachatez de mostrarnos en directo lo que nosotros repulsábamos, que es la demostración de un gasto desmesurado e innecesario en fuerzas armadas. El día 2 en Alicante se volverá a poner en evidencia que el Gobierno no tiene vergüenza; mientras el presupuesto en gastos militares sigue incrementándose, las migajas a proyectos de cooperación internacional y las discrepancias en el consejo de cooperación siguen ahí.
