Los ministros de Finanzas comienzan a diseñar el nuevo impuesto europeo
Bélgica, Alemania y los socialistas españoles apoyan la idea
El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, presentó a final de mayo su idea de crear un impuesto común que sustituya el sistema actual de contribuciones nacionales al presupuesto de la UE para superar los conflictos que surgen entre Estados miembros a la hora de negociar el marco financiero comunitario. La propuesta de Prodi se enmarca en el debate político global sobre el futuro de Europa, una de las prioridades de la presidencia belga en la UE, que toma el relevo de Suecia el próximo 1 de julio.
El primer ministro belga, Guy Verhofstadt, ya planteó esta idea a principios de año. La apoyan el ministro alemán de Finanzas, Hans Eichel, y el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. Reyders pretende que el primer debate tenga lugar en la primera reunión bajo presidencia belga del Ecofin, el próximo 10 de julio en Bruselas. 'Es importante que junto al debate de la ampliación y sobre la integración política de la Unión, no discutamos sólo del presupuesto y seamos capaces de tener una primera discusión sobre la posibilidad de organizar una financiación directa de parte del presupuesto de la Unión por la vía fiscal', explicó Reynders, que ayer compareció ante la prensa para dar cuenta de las líneas maestras en materia económica que regirán la presidencia belga.
El futuro impuesto, según Reynders, 'no tendrá que aumentar la presión fiscal sobre los ciudadanos ni las empresas de los países de la Unión'. 'Primero se discutirán los principios y, después, se buscarán los modelos apropiados y más justos', añadió.
Primer ejemplo de 'eurotasa'
La discusión estará vinculada al debate más general sobre la imposición directa e indirecta en la UE. Reynders explicó que el impuesto energético podría ser el primer ejemplo de la futura eurotasa, bloqueada por España.
La presidencia belga está dispuesta a ir por la vía de la cooperación reforzada -estrategia utilizada para crear el euro- para sacar adelante un acuerdo del mayor número de países posible, pero intentará hasta el final que la decisión sea adoptada por los Quince.
El ministro belga está dispuesto a lanzar un debate general sobre la fiscalidad energética ligado a los problemas en la liberalización de los mercados de la energía. Ésta es una de las condiciones que el Gobierno español ha puesto para empezar a hablar de tipos concretos. Madrid considera que cualquier armonización en el ámbito de la fiscalidad energética depende de que exista un mercado energético único real.
La prioridad de la presidencia belga en el seno del Eurogrupo -reunión de los 12 ministros de los países que integran la moneda única- será ultimar los preparativos para el lanzamiento de las monedas y billetes de euros a partir de enero próximo. Para empezar a familiarizar a los ciudadanos con la divisa única, Reynders presentó ayer en Bruselas al Señor Euro, un personaje animado e interactivo con forma de moneda y que será el protagonista de la campaña de información sobre el euro.
Por otro lado, el Banco Central Europeo mantuvo ayer los tipos de interés de la zona euro en el 4,5% en una decisión que no sorprendió a nadie después de que la inflación en la eurozona se disparara al 3,4% en mayo. El objetivo para todo el año está en el 2%.
