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El instituto de discapacitados buscará la integración sociolaboral de 1.049 personas

La nueva entidad pública presentada ayer sustituye al Convaser y dispone de 18 centros

El consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, presentó ayer el Instituto Valenciano de Atención a los Discapacitados (Ivadis) una institución pública que sustituye al antiguo Consorcio Valenciano de Servicios Sociales (Convaser) y que tiene el objetivo de integrar a este colectivo en la sociedad, como apuntó el responsable de la consejería. Blasco se comprometió a ir más lejos de la atención de los 1.049 personas que se encuentran en alguno de los 18 centros que dependen de este organismo y a trabajar en 'propiciar su integración sociolaboral'.

La nueva entidad pública reem,plaza al antiguo Consorcio Valenciano de Servicios Sociales (Convaser) que actuaba por separado en cada una de las tres provincias de forma que se unifica la atención a los discapacitados. En la presentación del organismo, que se celebró en el Palau de Congressos, Blasco señaló que la iniciativa muestra el compromiso de la Generalitat de 'propiciar la mejora en este ámbito con la plena participación' de todos los agentes implicados.

El consejero destacó que la creación del instituto supone el 'mayor reto realizado en España en la atención al mundo de las discapacidad' ya que es 'el primer instituto público con el que no sólo atenderemos a 1.049 personas discapacitadas sino que se propiciará su integración sociolaboral'. El Consell 'ha hecho una apuesta por intentar que las personas dependientes tengan una plena integración en el ámbito socio-laboral', dijo Blasco, quien recalcó que 'la apuesta ha sido por lo público a diferencia de lo que sucede en otras comunidades autónomas'.

Al acto, que contó con la presencia del director general de Discapacitados, Francisco Reverte, y del director gerente de Ivadis, Jorge Peña, asistió además el secretario general del Real Patronato de Atención a las Personas con Discapacidad, Francisco Mira, quien manifestó el apoyo y colaboración de esta institución a la creación del Ivadis. A la presentación del nuevo organismo acudieron también cerca de 1.000 personas entre representantes de los centros adscritos, familiares y alumnos de los propios centros.

Blasco resaltó el hecho de que sea un instituto público con presupuestos públicos, lo que 'expresa el nivel de compromiso por impulsar políticas sociales avanzadas'. Garantizó que la creación del organismo supondrá una mejora en la gestión de los centros adscritos 'que se simplificará y se hará de acuerdo con las familias, con los representantes de los trabajadores y con las organizaciones que trabajan en este ámbito' que integrarán el patronato del Ivadis. El consejero destacó 'el nivel de participación y consenso'con que cuenta esta iniciativa entre los representantes de los trabajadores, ya que tanto UGT como CCOO han elaborado manifiestos de apoyo a su constitución.

Asistentes a la inauguración del Ivadis ayer en el Palau de Congressos de Valencia.
Asistentes a la inauguración del Ivadis ayer en el Palau de Congressos de Valencia.MÓNICA TORRES
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Malnutrición 'poco preocupante'

No es 'excesivamente preocupante' que el 27% de los ancianos sufra malnutrición en las residencias. El resultado de un estudio sobre la alimentación de los mayores en residencias de la Comunidad, en el que participó Bienestar Social, no causó sorpresa al responsable del departamento, ya que, señaló, en la población general el porcentaje de personas con mala nutrición 'es bastante superior'. Blasco aseguró a los periodistas que este informe ha sido elaborado desde su propio departamento, lo que significa, dijo, 'que no tenemos ningún problema para reconocer y admitir cual es la situación de estas personas'. El consejero explicó que es un porcentaje que expresa una mala nutrición por parte de estas personas 'pero en el conjunto de la población hay más de un 27% de personas que tenemos una mala alimentación y que abusamos de grasas o de comidas o bebidas no adecuadas'. A juicio del consejero, el porcentaje de desnutrición entre los ancianos 'expresa los niveles de mala alimentación, teniendo en cuenta que algunas de estas personas atraviesan en algunas etapas problemas de depresión, de no querer comer, de que no les gusten los alimentos o de que por los tratamientos terapéuticos se ven obligados también a un tipo de comida que no representa una situación global de solución'.

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