El club no pondrá entradas a la venta para el partido del domingo
El Santiago Bernabéu, con capacidad para 75.000 espectadores, se convertirá en un estadio minúsculo el próximo domingo. Minúsculo con respecto a la demanda de entradas que ha generado el partido contra el Barcelona. Tan pequeño, que según la página web del Madrid no saldrá una sóla entrada a la venta para el público general. 62.500 asientos corresponden a los abonos, por lo que sólo quedan 12.500 billetes libres. Los socios no abonados podrán adquirir 1.000 de esas entradas restantes, 6.000 serán para las peñas madridistas y las últimas 5.000 beneficiarán a diversos 'compromisos'. Estos 'compromisos' se desglosan entre 'los jugadores, los empleados, patrocinadores, organismos oficiales y otros que gestiona el departamento de protocolo de la entidad'. Según el club de Chamartín, para el encuentro se 'podrían vender dos o tres veces el aforo del estadio'.
Un tumulto que contrasta con la Ciudad Deportiva del Real Madrid, que con el equipo volando hacia Moscú, quedó ayer desierta, convertida en un hospital de campaña. Karanka, Guti, Geremi, Iván Campo, Roberto Carlos y Savio se acercaron al centro médico para calibrar sus dolencias y sus posibilidades de estar listos para el gran choque del domingo contra el Barcelona. Unas posibilidades más bien inciertas en todos los casos con excepción del de Guti, que arrastra un esguince en un tobillo y ayer hizo ejercicios con los fisioterapeutas del club. El otro jugador con alguna opción de recuperarse a tiempo es Geremi.
