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Un líder tribal sigue dentro de Afganistán desafiando a los talibán

Karzai sobrevivió a un ataque e intenta organizar la resistencia desde el interior

Ángeles Espinosa

Hamid Karzai sigue vivo. El notable pastún desafía desde hace un mes la amenaza de ejecución de los talibanes y busca dentro de Afganistán el apoyo de otros líderes tribales para el regreso del rey. 'Estoy pidiendo asistencia internacional para que se ayude al pueblo afgano a librarse de los terroristas extranjeros que controlan el país', dijo ayer en una llamada a la BBC desde su escondite en la provincia de Oruzgan. 'Quiero que mi país pertenezca a los afganos', afirmó.

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'Que se vayan de Afganistán los elementos terroristas extranjeros', subrayó este destacado exiliado monárquico que fue viceministro de Exteriores antes de la llegada de los talibanes al poder. Karzai, de 46 años, aseguró que no pedía ayuda para derrotar a los talibanes, algunos de los cuales, dijo, 'también son afganos', sino para librarse de los extranjeros, en una clara referencia a los árabes de Al Qaeda, el grupo de Osama Bin Laden que según algunos analistas controla a los talibanes.

'Necesitamos ayuda, tanto militar como humanitaria', declaró antes de subrayar que todavía se encuentra en el interior de Afganistán. Karzai desmentía así la versión de Estados Unidos de que sus helicópteros le habían evacuado a Pakistán a raíz del ataque que sufrió la semana pasada. Fuentes talibanes aseguraron entonces que habían matado a dos de los hombres que le acompañaban y detenido a otros 25, extremo que fue desmentido a este diario por su hermano Ahmed Wakil, con el que habla a diario vía satélite.

Atacado por árabes'Fui atacado por árabes, pero afortunadamente algunos vecinos de los pueblos corrieron durante más de una hora para venir a avisarnos del ataque y pudimos prepararnos', explicó en su llamada a la radio británica. 'Estoy vivo, me encuentro bien y sigo en Afganistán', insistió. Karzai se ha convertido, tras la ejecución del comandante Abdul Haq a finales de octubre, en la esperanza de los sectores pro monárquicos de encontrar respaldo local al regreso de Mohamed Zahir Shah y la convocatoria de una Loya Jirga (gran asamblea tradicional) que organice la transición postalibán.

Karzai es un relevante miembro de la tribu de los popalzai y pertenece al mismo clan que el ex monarca. Inicialmente respaldó a los talibanes frente al desorden y las luchas intestinas de los muyahidin. Sin embargo, a partir de la toma de Kabul, se distanció de sus políticas y se exilió en Quetta, donde se ha convertido en uno de sus críticos más activos.

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Según su narración del enfrentamiento del jueves pasado, tras casi 10 horas de combate él y sus hombres lograron repeler el ataque. 'Caminamos durante tres días de pueblo en pueblo hasta que logramos alcanzar un lugar seguro con la ayuda de campesinos y nómadas', relató. Karzai también dijo que durante esos tres días sólo tomaron té verde y pan.

Los talibanes han anunciado esta semana haber ejecutado a tres miembros de su grupo. Dado que ha desmentido que detuvieran a ninguno, es de temer que los ajusticiados fueran algunos de los hombres que les ayudaron a escapar.

'Estoy decidido a permanecer aquí. Confío en Dios y estoy seguro de que va a ayudar al pueblo afgano a reconquistar su país', concluyó. Karzai se encuentra acompañado por un grupo de seguidores, entre 200 y 700 hombres armados, según las fuentes.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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