ERC de las comarcas del Ebro carga contra la "incompetencia nacional" de Medio Ambiente
La salida de tono de ICV en el sur de Cataluña no fue la única durante el día de ayer. La federación de Esquerra Republicana en estas comarcas colindantes del Ebro rechazó la noche del martes la dimisión de todos sus representantes en el Gobierno. Tanto el delegado de la Generalitat en las Tierras del Ebro, Lluís Salvadó, carodista, como los múltiples directores de servicios territoriales de los republicanos pusieron su cargo a disposición del partido también como señal de rechazo a la interconexión de redes.
En un comunicado dicha federación dice sentirse "profundamente incómoda ante la situación contradictora en que se encuentran nuestros representantes en el Gobierno". Pero esta regional recuerda que la situación actual "es fruto de la incompetencia nacional de la gestión del agua que ha llevado el consejero de Medio Ambiente".
La ejecutiva regional consideró que manteniéndose en el Gobierno tripartito, ERC puede condicionar al menos que la interconexión tenga finalmente un carácter reversible y que nadie aproveche la situación creada para aumentar la concesión de agua que pesa sobre el Ebro.
Por su parte, el alcalde de Tortosa, Ferran Bel (CiU), anunció ayer que el Consistorio que preside se mantendrá "beligerante y firme" contra la interconexión. Bel, que gobierna con apoyo de Esquerra, se desmarcó de la posición de su partido al afirmar: "Soy alcalde de Tortosa, no de CiU". Para el alcalde de Tortosa, el acuerdo entre el Ejecutivo español y el catalán es un "paseo militar, igual al que quería hacer el PP con el Plan Hidrológico Nacional (PHN), pero más refinado".
No todo fueron cargas contra Francesc Baltasar, como mínimo desde Iniciativa. El consejo político comarcal de ICV en el Baix Llobregat -cuna del consejero Baltasar, ex alcalde de Sant Feliu de Llobregat- aprobó ayer una resolución en la que da apoyo a las medidas adoptadas por el titular de Medio Ambiente para hacer frente a la situación de sequía que afecta a Cataluña. El texto de la resolución afirma: "con ICV en el Gobierno catalán se ha hecho un giro radical hacia una política y gestión sostenible del agua que tiene como finalidad principal la garantía de su disponibilidad como recurso necesario para la vida".
