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Reportaje:PROPUESTAS

Como en casa, pero en el campo

Desde un pazo íntimo rodeado de praderas y bosques hasta un cortijo malagueño donde se mima con mucho celo al huésped. Cinco alojamientos rurales donde conviven intimidad y buen gusto

Paco Nadal

Presentamos una selección de cinco casas rurales con mucho encanto, pocas habitaciones y un trato personalizado de sus propietarios, que viven aún en ellas y atienden personalmente a sus huéspedes.

Castelo de Andrade

Pontedeume (A Coruña)

A sólo seis kilómetros de Pontedeume y rodeado por un denso bosque autóctono, este pazo tradicional resume todas las excelencias del mejor interiorismo rural. Alberto Morales y Eugenia Fernández han creado una atmósfera de intimidad y buen gusto en la que no hay un solo rincón ni detalle descuidado. Un gran salón ambientado con unos cálidos y suaves tonos calabaza da la bienvenida. A un lado está la lareira (hogar), tradicional de toda casa de campo gallega. Y al otro, una enorme cristalera que deja entrar luz a raudales y encuadra la gran pradera herbácea que rodea la casa, como si de una televisión de plasma gigante se tratara. Es el rincón más espectacular de la casa. Pero hay muchos más. Como la habitación Verano, en tonos naranjas, que ocupa una esquina de la vivienda con balcón propio y una luz especial. O la que está decorada completamente en tonos blancos y cremas. Así hasta cinco alcobas en la casa principal y otras cinco en el antiguo pajar, a cual más sorprendente y deliciosa, todas con colchones de látex y buena lencería de cama.

» 981 43 38 39; www.casteloandrade.com. Dobles, de 78 a 110 euros. Desayuno, 9 euros.

La Posada del Río Carbó

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Villahermosa del Río (Castellón)

El entorno no puede ser más rural. Allá abajo corre el río Carbó, con buenas pozas para bañarse. La aldea no tiene más que media docena de casas, y ésta es la única habitada todo el año. Sólo se ven pinares y roquedos. Y el siguiente núcleo de civilización está a más de kilómetro y medio por una buena pista de tierra. Así es este alojamiento rural, en el que Pedro y Teresa llevan más de 20 años viviendo una vida comprometida con la naturaleza. Decoración muy rústica, con cantos rodados de río incrustados en las paredes, suelos y cabezales de camas; un peculiar interiorismo hecho por ellos mismos. No hay grandes lujos, pero sí mucha limpieza, autenticidad, silencios y un entorno soberbio para descansar. Merece la pena quedarse a cenar, relajarse luego en la terraza o disfrutar de un rato de televisión o lectura frente a la chimenea, que está siempre encendida. Ofrecen cocina vegetariana bajo pedido.

» 680 62 20 77 - 659 61 21 12; www.laposadadelriocarbo.org. La doble, de 45 a 55 euros por persona y día con desayuno.

La Cañada del Sacristán

Villanueva del Rosario (Málaga)

Pese a ser originarios del otro extremo de la Península, Antonio y Mari Carmen han recreado en una preciosa campiña de olivos cerca de Antequera toda la magia de un cortijo andaluz. Abundan los suelos de barro cocido y los hidráulicos, las paredes de yeso rústico, la azulejería andaluza original y algunos aperos de labranza y objetos étnicos por las paredes, pero sin agobiar ni recargar. Así condensan todo el sabor y la tipología de este tipo de haciendas, pero pasándolo por un tamiz de modernidad. Para que la atención fuera realmente personalizada optaron por abrir sólo cuatro alcobas, frescas, luminosas y amplias, cada una con su balcón propio que mira al mar infinito de aceitunas que rodea la finca. Antonio está a cargo de la cocina, en la que vierte su mucha experiencia en sociedades gastronómicas vascas. Productos de temporada, mermeladas caseras, zumo natural, bizcochos hechos en su propio horno... La casa está rodeada de terrazas donde disfrutar al fresco de las noches de verano. Las dos mejores habitaciones son El Rincón de la Alberca, con un enorme baño de aires moriscos, y Mirador de la Era, con terraza en vez de balcón.

» 679 86 98 96 - 656 41 13 67; www.canadadelsacristan.com. La doble con desayuno, de 73 a 109 euros.

Peña Abantos

Nogueruelas (Teruel)

Amparo y Sefo han dedicado la mayor parte de su vida al mar. Navegantes intrépidos y solitarios, vivieron durante décadas surcando los siete mares en un barco de vela. Hasta que decidieron arribar definitivamente a puerto y cambiar las soledades del mar por las no menos emocionantes soledades de la sierra turolense de Gúdar. Uno de los grandes valores de la casa a la que se han retirado a vivir es su ubicación: aislada y solitaria en mitad de un bosque de pino negro y albar, a ocho kilómetros de pista de tierra de la carretera más cercana y a 15 del siguiente pueblo; asomada a un cantil de piedra desde el que se ve el valle de Nogueruelas, la sierra de Javalambre y las águilas volar. Alquilan seis habitaciones, similares en decoración, con tonos cremas y wengé, mucha luz y con altillos en tres de ellas, muy prácticas para familias con niños. Silencio, paz y relajación asegurados en un entorno memorable. Un buen sitio para caminar, hacer excursiones con bici de montaña o simplemente pasar el rato de contemplación o lectura frente a la chimenea o en la terraza, con un escenario infinito por delante.

» 609 70 59 32 - 618 84 91 22; www.ruralabantos.com. La doble con desayuno, 100 euros.

El Secanet

Algimia de Alfara (Valencia)

Cuando el huésped llega a esta casa del casco urbano de Algimia no supone lo que le espera tras la frugal y anónima fachada. Gemma Company y su marido, Salvador Estellés, han creado uno de los mejores alojamientos rurales de la Comunidad Valenciana, sin miedo a asumir riesgos. Para empezar, sólo tres habitaciones, para que el huésped sienta el recogimiento de un hogar y no la masificación de un hotel. Y pocos reparos a la hora de buscar el confort y el detalle: sábanas de algodón peinado, libros en la mesilla, flores frescas, mullidas toallas, productos Damana en los baños y una medida combinación de mueble antiguo, colores mediterráneos y mucha luz hacen de los tres dormitorios unas estancias para descansar, para estar y para soñar. Detrás se abre un jardín lo suficientemente grande como para que cada huésped encuentre su espacio de intimidad y lo suficientemente pequeño como para prolongar la atmósfera de casa encantada que reina en sus interiores. Un lugar para quienes busquen el silencio y la contemplación, la charla con los propietarios o un desayuno entre naranjos.

» 962 62 65 27; www.elsecanet.com. Dobles con desayuno, de 65 a 80 euros.

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