_
_
_
_
_
UNIÓN EUROPEA

Aznar arremete contra las "ocurrencias" de Zapatero sobre el futuro de la UE

El presidente del Gobierno anuncia que fijará su posición cuando llegue "el momento oportuno".- Aprecia demasiado "sabor nacional" en las propuestas de Francia y Alemania

En la presentación del inicio de los trabajos del Consejo para el Debate sobre el Futuro de la UE, el jefe del Ejecutivo ha asegurado que el Gobierno español "no tardará" en fijar su posición en el debate sobre la futura configuración y nombre de las instituciones comunitarias, pero lo hará cuando llegue "el momento oportuno".

Aznar, que en ningún momento ha aludido directamente al PSOE ni a su secretario general, ha salido así al paso de quienes "piden del Gobierno español que no tarde ni un minuto más en poner sobre la mesa un diseño institucional de la Europa del futuro", como si este continente y el mundo entero se fuera a acabar.

El presidente del Gobierno, que encuentra "demasiado sabor nacional" en las propuestas de "distinguidos mandatarios europeos", ha precisado que el Ejecutivo español fijará su posición cuando crea llegado el momento oportuno, pero sin pretender "perseguir la originalidad a toda costa" o echar su particular "cuarto a espadas".

Más información
Prodi propone un impuesto europeo para financiar el presupuesto de la UE
Lo que separa a París y Berlín
Jospin rechaza el modelo federal de Schröder y propone una Europa de Estados-nación
Texto íntegro: Propuesta del PSOE sobre el futuro de la UE

Ante los integrantes del Consejo que preside Alvaro Rodríguez Bereijo, ex presidente del Tribunal Constitucional, Aznar ha recalcado que "lo llamativo es proponer tal o cual institución, avanzar cuál debería ser su composición y además discutir cómo se debería llamar, pero eso tiene que ser justamente lo último".

"Lo importante no es que la Comisión Europea pase a llamarse Gobierno europeo, sino saber qué va a hacer, qué competencias va a tener, cómo las va a ejercitar y con qué controles", ha argumentado al respecto, y ha insistido en que "eso no pueden ser decisiones previas, sino las consecuencias de unas decisiones de mayor calado".

En este sentido, ha animado a reflexionar sobre "cómo y quién" debe tomar las decisiones, redactar las normas, ejecutarlas y juzgar las infracciones, de modo que, una vez resuelta esta tarea, "que no es poca", habrá llegado "el momento de dar forma y nombre a las instituciones" que "canalicen" las decisiones adoptadas.

"Yo tengo, como todo el mundo, mis gustos, prefiero unos productos antes que otros, pero tampoco vamos a confundir unas primeras manifestaciones o documentos de partido con definitivas posiciones de Estado", ha advertido Aznar, y ha puntualizado que no dirigía estas precisiones a otros Gobiernos, sino a "algunos interlocutores" españoles, para que las "valoren en su justa medida".

El informe del PSOE

Con estas reflexiones, Aznar se refería implícitamente al informe presentado por el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, que incluye un conjunto de propuestas sobre la financiación, el funcionamiento institucional y la construcción política de la UE.

Frente a los "europesimistas" y "con el permiso de esos entusiastas de un futuro idealista que nunca llega a golpes de decreto, sin pretender volver a la realidad a los nostálgicos de un pasado idílico que nunca existió en el seno de la Comunidad", Aznar ha abogado por discutir "con tranquilidad" las cuestiones propias de todo debate europeísta "maduro".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_