_
_
_
_
_

El fiscal exculpa a un edil de Parla de la muerte de un niño por electrocución

¿Es responsable el Ayuntamiento, de Parla de. la muerte del niño que falleció electrocutado al tocar una farola averiada cuando jugaba en una plaza pública? Ésa es la cuestión que debe resolver la Sección la de la Audiencia de Madrid, en donde se enjuiciaron ayer las circunstancias que rodearon la electrocución del niño de ocho años Enrique Alcantara. La fiscal exoneró de responsabilidad al concejal de Mantenimiento, Francisco Robledillo, pero mantuvo su acusación de imprudencia contra el director técnico de ese área, el encargado y dos de los electricistas municipales.

Más información
Todavía hay farolas en los parques del modelo que electrocutó al chaval

Los hechos ocurrieron en la plaza de la Independencia de Parla, el 29 de agosto de. 1990. El niño falleció al abrazar una farola cuyos cables estaban al aire libre. El menor, que estaba sudando, cayó desplomado al suelo tras recibió una fuerte, descarga eléctrica.El juicio se prolongó durante toda la jornada, hasta las diez de la noche. En un principio, la fiscal acusaba a cinco personas, entre ellas al concejal de Urbanismo, quien al final fue exculpado por considerar la fiscal que no es responsable directo del fallecimiento del niño.

No obstante, la abogada de la familia, Begoña. González, sigue manteniendo que Robledillo es culpable junto con los electricistas y los dos técnicos citados- de una imprudencia temeraria con resultado de muerte. Los dos electricistas procesados son Nicolás Prieto y Juan Carlos Rodríguez. El, fiscal pide para cada uno 12 meses de cárcel. Igual pena exige para el director de Mantenimiento, José Domenech, y para el encargado de ese área, José Narajo. Los procesados dijeron al tribunal que no tenían constancia de que en la plaza de la Independencia hubiese una farola con los cables sueltos.

La fiscal alega que el Ayuntamiento tenía constancia fehaciente de que en la mencionada plaza había una farola que representaba "un serio peligró para los viandantes. De hecho, dos meses antes del accidente,, en mayo de 1990, un vecino avisó de quejos cables de esa farola eran un riego para los viandantes.

Ninguno, de los acusados supo aclarar cómo había sido posible que no se hubiese repara do en. tanto tiempo el citado foco, luminoso, y menos cuando el arreglo de ese tipo de averías, "por su peligrosidad", tiene preferencia sobre otras, según reconocieron.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Indemnización

La abogada de la familia del menor reclama una indemnización de l0ó millones y declara al Ayuntamiento responsable subsidiarió. El fiscal pide 25 millones. Los abogados defensores reclamaron la absolución de los inculpados por entender que no tienen ninguna responsabilidad en el suceso.

Los padres del menor también testificaron ayer: "Nuestro otro hijo, de, repente, nos llamó: 'Quique está tendido en el suelo. Cuando llegamos le daban masajes... Lo llevamos rápido a un centro de salud, pero. Ya, había muerto. La familia ha perdido la felicidad que tenía antes".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_